Título original del artículo: «Cómo combatir el estrés en el trabajo»
«Cómo mantener la cordura en el trabajo (sin perder la paciencia ni llorar en la oficina)»
Trabajar puede ser estresante y, aunque a veces parece imposible, es importante mantener la cordura en el trabajo. Algunos días, sin embargo, puede resultar difícil. Aquí tienes algunos consejos que te ayudarán a no perder la paciencia ni a llorar en la oficina.
Recuerda por qué estás ahí:
¿Alguna vez has considerado la posibilidad de que tantas horas extras y reuniones aburridas y largas sean necesarias porque tu jefe no tiene nada mejor que hacer? Bueno, sea cual sea la respuesta, recuerda por qué estás ahí en primer lugar. Piensa en tu sueldo, en tus beneficios, en lo que te gusta de tu trabajo y en cómo te hace sentir ser una pieza importante en el engranaje.
Usa el humor
Puedes usar el humor a tu favor. A veces, una broma ligeramente picante o un comentario divertido sobre tu jefe o compañeros de trabajo puede transformar un ambiente amargo en un espacio agradable. Ríete de ti mismo si es necesario y haz que la gente se ría contigo.
Haz pausas
No trabajes más horas de lo necesario. Si trabajas todo el día, siete días a la semana, sin descanso, estás pidiéndole demasiado a tu cerebro y a tu cuerpo. Haz pausas para caminar, charlar, tomar un café o simplemente respirar. Tu cerebro y tu cuerpo te lo agradecerán.
Sé honesto/a
Habla con tus compañeros de trabajo y con tus superiores si estás atravesando un momento difícil o si te sientes abrumado. Todos hemos estado ahí. No hay necesidad de esconder tus emociones o de sentirte avergonzado/a. Si te sientes mejor, puedes comenzar con una pequeña broma sobre cuánto odias el trabajo o cuánto te aburres en las reuniones.
Aprende algo nuevo
Las personas que constantemente están aprendiendo cosas nuevas tienen menos posibilidades de aburrirse o de adoptar un enfoque negativo en la vida. Busca oportunidades para aprender, ya sea en tu trabajo o fuera de él. Incluso puedes tomar algún curso en línea en tu tiempo libre.
No te lleves el trabajo a casa
No es saludable llevarse el trabajo a casa. Trata de separar tus compromisos laborales de los personales y encuentra un equilibrio. Tu cuerpo y mente necesitan tiempo libre para descansar y recargar sus baterías, así que asegúrate de no descuidar tus relaciones y tus aficiones.
En conclusión
Mantener la cordura en el trabajo es posible. Recuerda por qué estás ahí, haz uso del humor, haz pausas, sé honesto/a, aprende algo nuevo y no te lleves el trabajo a casa. Si sientes que estás perdiendo el control, no dudes en buscar ayuda. En última instancia, debes recordar que tu salud mental es lo más importante y que mereces estar en un ambiente de trabajo saludable y positivo.